En 2006 los agricultores se percataron de que las colonias de abejas (apis melifera) que tenían desaparecían de un día para otro. Y tuvo tal alcance que hasta recibió un nombre: colapso de colmena. Y esto no solo afectaba a colonias controladas, también afectó a las abejas silvestres. El colapso de colmena tiene varias razones. Aquí algunas de ellas.
Falta de alimento
Para las abejas el alimento cada vez es más difícil de conseguir, debido a que el hombre está destruyendo las plantas que contienen flores que nutren a las abejas.
Insecticidas
Muchos insectos y bichejos son aficionados a dañar nuestros cultivos, y nosotros pensamos siempre en utilizar pesticidas, muy eficaces. Pero también eliminamos a nuestros aliados del huerto: las abejas. Además, también eliminamos a otros insectos y arácnidos que se comen a los bichos que dañan nuestro huerto. Aquí, una abeja muerta. Probablemente por insecticida.
Ácaros
El piojo de las abejas (genero varroa) parasitan a las abejas melíferas y su distribución coincide, lógicamente, con la del insecto. Su presencia en una colmena puede producir serios daños en esta, especialmente si ataca a la reina, ya que puede acabar con su capacidad reproductora. La abeja de la imagen, por desgracia, a sido parasitada por uno de estos ácaros.
Enfermedades
Son muchas las enfermedades que afectan a las abejas: la ascoferosis, la nosemosis, la parálisis de la abeja, la ricketsiosis, la aspergillosis, el virus de las alas deformes …Pero las más amenazantes para la colonia son las de la reina: la de las celdas reales negras y la melanosis.
El colapso de colmena es no solo un perjuicio para las abejas, sino para nosotros, ya que polinizan el 80% de las plantas, incluyendo las de cultivo, y ayudan en la polinización de plantas de cuyos frutos comemos.
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